domingo, 6 de marzo de 2016

Dimensión de figura de Garrido y Roca Rey en Olivenza

Por Fernando Farfán

Cuarta de la Feria de Olivenza. Mañana triunfal la protagonizada por Joselito Adame, José Garrido y Andrés Roca Rey. Ocho orejas, un rabo, y tres toreros a hombros fue el saldo producto de la buena actuación de los
matadores, de una afición festiva y un juez dadivoso. Los toros para la ocasión fueron de Núñez del Cuvillo bien presentados, pero desiguales y de juego dispar. Floja corrida del hierro gaditano a los que el buen quehacer de los matadores hicieron verlos mejor de lo que eran siendo: descastado y flojo de manos el primero, soso y sin trasmisión el segundo, flojo noblón el tercero, bueno con clase el cuarto, descastado protestón el quinto e invalido imposible el sexto.
Tarde triunfal con tres toreros a hombros

Joselito Adame (Blanco y plata): Oreja y dos orejas.
Jose Garrido (Grosella y oro): Dos orejas y oreja.
Andrés Roca Rey (Palo rosa y oro): Dos orejas y rabo; y petición de oreja. 

La mañana vivida en Olivenza es de la que hacen afición con tres jóvenes toreros con hambre de triunfo a hombros y de corte distinto, destacando la personalidad y empaque de Garrido; y la variedad, frescura y actitud arrolladora de Roca Rey.

Joselito Adame estuvo inteligente con su primero, estructurando una faena en función a la poca fuerza del "Cuvillo" dándole tiempo y distancia. El toro no humilla, sale con la cara alta y no transmite. Se perfila de lejos para entrar a matar y deja una entera trasera. Oreja concedida que marcó el derrotero de trofeos exagerados de la tarde.

Su segundo fue el mejor toro del encierro, noble, con calidad, de embestida larga y franca. El inicio con la muleta es torerísimo rematando la serie con el pase del desdén. Lo que siguió fueron derechazos templados de mano baja, toreando despatarrado llevando largo al toro consiguiendo series ligadas. Por la izquierda el toro la toma, pero sale distraído del engaño. Estoconazo en la suerte de recibir, dos orejas más y pañuelo verde.

José Garrido tuvo en sus manos lo peor del lote, pero dejó la impronta de su toreo profundo. Clasicismo y entrega que van hacer de él protagonista de la presente temporada y futuro mandón del escalafón.

Buen manejo del percal con el primero y mucha actitud haciendo el quite del caballo capote en la espalda y de rodillas. Con la muleta los primeros pases son sin obligar al toro. Mejor las siguientes tandas con muletazos de buen trazo y toreando con profundidad. Poco trasmite el toro y Manoletinas finales para rematar la faena. Mejor no se puede estar con un toro que ofrece tan poco. Estocada desprendida y ve caer el pañuelo blanco por partida doble.

Con su segundo estuvo muy por encima, variado con el capote galleando por Chicuelinas y quite por Delantales. Con la muleta Estatuarios al inicio quedándose quieto como una vela. Por el derecho el toro protesta los muletazos, por el izquierdo la toma mejor pero se queda corto. Faena de menos a más obligando a embestir al toro a base de buena colocación y mando. Mata de una casi entera trasera. Oreja.

Andrés Roca Rey reeditó sus buenas actuaciones en América. Torero al que todos los toros le valen, con aires de figura en su andar y de rápida conexión con el púbico. Cabeza privilegiada, valor y serenidad para resolver en la cara del toro.

A su primero que sale abanto lo recibe lanceando con suavidad a la Verónica, lo lleva al  caballo con un vistoso galleo capote en la espalda y lo quita por Saltilleras ajustadas y sin enmendar la posición. Inicia su faena muleteril como es habitual con pases cambiados por la espalda para seguir con un pase con el revés de la pañosa, una Arrucina y rematar la serie con el de pecho. Otro toro escaso de fuerza y sin chispa, pero noblón y obediente. Los muletazos son largos y templados tirando del toro. Con la izquierda toreando con los vuelos, muy encajado y rematando atrás. Enorme el peruano, con capacidad, solvente y muy seguro. Faena en la que todo lo puso el torero. No se puede hacer más con tan poco. Estoconazo para rematar una faena de auténtica figura. Dos orejas y su primer rabo en España y vuelta al ruedo para el toro que resulta exagerada.

Con el último de la tarde y segundo de su lote no tuvo opción. Un auténtico invalido con el que estuvo firme. Por más que trató de aliviar al toro y no forzarlo fue imposible mantenerlo en pie. Arrimón final rozándose los pitones en la taleguilla. La suerte suprema a un tiempo, pinchando al primer intento para dejar luego una entera.


Foto: Toros en el Mundo

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