Por: Fernando Farfán
El marco no podía ser mejor
para la primera de abono en Lima. Brillo solar y plaza llena. Se
corrieron toros del hierro español de Daniel Ruíz con un trapío indigno
para una plaza de primera. Anovillados y cómodos de cara. El público se merece
respeto más aún
sabiendo que en Acho se pagan las entradas más caras del mundo.Enrique Ponce: Saludo y silencio.
Andrés Roca Rey:
Oreja y saludo.
Joaquín Galdós:
Oreja y dos orejas.
Detalles:
Se guardó un minuto de
silencio por las sensibles perdidas pérdidas en lo que va del año.
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Tarde de contraste la vivida
hoy en Acho.
Si miramos la actuación de la terna, la tarde fue de triunfo, con un Joaquín Galdós pletórico
de arte por la puerta grande, un Andrés Roca Rey
entregado, que perdió la segunda oreja por la espada, y un Enrique Ponce
sin suerte
con su lote tirando de oficio. Si miramos los toros la tarde fue decepcionante y no tanto por el juego que dieron, sino por su presentación. Si Acho se dice plaza de primera no puede lidiarse lo que salió hoy al ruedo. Toros anovillados, con dos impresentables, segundo y tercero. Y si nos referimos al tercio de varas hoy fue inexistente. En cuanto a juego fue soso el primero, manso huidizo el segundo, con recorrido sin humillar el tercero, inválido el cuarto, manso con la embestida descompuesta el quinto y bueno el sexto.
con su lote tirando de oficio. Si miramos los toros la tarde fue decepcionante y no tanto por el juego que dieron, sino por su presentación. Si Acho se dice plaza de primera no puede lidiarse lo que salió hoy al ruedo. Toros anovillados, con dos impresentables, segundo y tercero. Y si nos referimos al tercio de varas hoy fue inexistente. En cuanto a juego fue soso el primero, manso huidizo el segundo, con recorrido sin humillar el tercero, inválido el cuarto, manso con la embestida descompuesta el quinto y bueno el sexto.
Joaquín Galdós
ha estado cumbre. Torero de arte que para nada le pesó tener por delante a dos
figuras del toreo. El gallo es otro, pero hoy el que cantó fue él. Dimensión de
torero bueno y cuajado. Tarde redonda del peruano que cortó tres orejas, que
bien debieron ser cuatro, sino fuera por la mezquindad y falta de sensibilidad
del juez.
A su primero lo recibió con
una larga cambiada. El toro fue pitado de salida por su escasa presencia. En el
caballo se le rompe el palo al varilarguero en la primera entrada y en la
segunda el toro recibe solo un picotazo. El quite es por verónicas y la media
en los medios acompasada. Con la muleta es buena la primera tanda y mejor el de
pecho. El toro tiene recorrido, pero no humilla. Lo cita de lejos Joaquín y
acude el burel. Los derechazos son templados y de un gusto exquisito. Con la
izquierda estuvo enorme, despaciosidad, hondura, echando los vuelos de la
muleta y tirando del toro. Hubo dos tandas de esas que te pagan la entrada y
los remate por bajo de cartel. Faena de dos orejas rematada con un espadazo. La
plaza se cubrió de pañuelos blancos, pero el juez solo concedió una.
Con su segundo salió a por
todas. El juez le había negado en el anterior la puerta grande y no se iba a
quedar tranquilo. Se enrazó y decidido se fue a la puerta de chiqueros a porta
gayola. En el caballo un solo puyazo y el quite otra vez por verónicas. Lo
brinda Joaquín al público. Inicio por bajos, rodilla flexionada y el de pecho
destilando torería. El toro repite y los muletazos son ligados. Inicia otra
tanda con el pase de las flores y despatarrado sigue toreando llevando largo a
su oponente. Joaquín paró los relojes, se abandonó toreando al natural y sacó a
los duendes a pasear. Los de pecho otra vez son de cartel y hay una
trincherilla de escándalo. Faena cumbre, rebosada de clasicismo. Este es el
toreo eterno. La espada entera quedó algo trasera, pero esta vez no le quedó más
remedio al juez que sacar los dos pañuelos. Acho cayó rendida a los pies de
Joaquín y se escucharon los gritos de ¡torero! ¡torero!
Andrés Roca Rey
puso todo de su parte y utilizó todos sus recursos para salir airoso.
A su primero, el otro
impresentable de la corrida, lo recibió lancenado por chicuelinas en los medios
que callaron las protestas. El tercio de varas pasó inadvertido y solo es
señalada la puya. El toro sangró más con el arpón de la divisa. Quitó por
tafalleras Andrés y bien Alonso Mamani con los palos. Tres cambiados
por la espalda quieto como una vela para iniciar faena, seguido de la arrucina
y el cambio de mano. El astado sale distraído. Lo intenta Andrés dejándole la
muleta en la cara para poder ligar. No hay toro y apela al toreo accesorio que
emociona. Luquecinas mirando al tendido y bernardinas apretadas. Se volcó sobre
el morrillo y deja un entera desprendida y trasera. Oreja benévola del
respetable que quiere ver triunfar a su torero.
Su segundo embiste a la
defensiva en el capote. Se arranca al caballo que guarda la puerta y recibe un
picotazo. Roca Rey capote a la espalda le receta una saltilleras que no salen
limpias. Bien Dennis
Castillo cubriendo el segundo tercio. Brindis al público e
inicia por estatuarios que remata con el pase del desdén. El toro embiste
descompuesto queriendo puntear el engaño. A ritmo de marinera le baja la mano
Andrés y torea con mando. Redondos invertidos y pases por la espalda. Todo lo
puso el torero. Faena de aguante entre los pitones con pases de todas las
marcas. Aquí emocionó toreando. Lástima la espada. Dos pinchazos y una entera.
Enrique Ponce
se topó con lo peor de lo peor. Tiró de oficio y sapiencia con su primero, pero
aburrió a la concurrencia con su segundo.
El que abrió plaza echa las
manos por delante y se revuelve rápido. En el caballo el toro empuja con la
cara a media altura y pica arriba José Palomares. Inicia Ponce
por doblones y es templada la primera tanda. No tiene recorrido el toro y sale
con la cara alta, además de no trasmitir. Por el izquierdo va peor. El toro
protesta, tiene mejor inicio que final y los muletazos son de uno en uno. Ponce
alarga las embestidas y le corrige defectos llegando a meter al toro en la
muleta. Faena larga que corona con una media estocada.
Su segundo se puede resumir
con un bocinazo que se salió de sol: Mucho torero para tan poco toro. El
de Daniel Ruíz fue un invalido sin clase. Trasteo insulso de Ponce alargando en
demasía la faena. Pinchazo y una entera.
Foto: Martín Campos
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